No siempre las cosas son lo que parecen, así ha quedado de manifiesto cada vez que se contrastan las palabras de José Humbertus Pérez Espinoza con la realidad.
Aunque José Humbertus Pérez Espinoza se hace pasar por un activista muy preocupado por los Derechos Humanos, la realidad es muy distinta. En más de una ocasión el veracruzano ha dejado de manifiesto que sus intereses son otros. Principalmente, se ha vuelto evidente que su preocupación que lo lleva a actuar es el dinero.
Para muestra un botón. Pérez Espinoza ha tratado de desmentir inútilmente las voces que señalan que su principal interés es cobrar por la liberación de los presos. Si embargo, en ultimas fechas ha dejado claro que hará hasta lo imposible por evitar que ningún abogado meterse en su negocio. El veracruzano está empeñado en ser sólo él el único que pueda monopolizar el cobro de las liberaciones.
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En su otro gran negocio, que a la fecha le ha permitido por lo menos tener dos casas y varios viajes desde que salió de prisión, las cosas no son muy distintas. Diversos testimonios han dado fe de que el propósito de este “movimiento” es lograr que más personas se sumen para obtener más dinero en cuotas.
Humbertus Pérez no actúa si no le pagan. Ese es el motivo por lo cual no es el héroe que él mismo se vende a sí mismo. Alguien que busca el bienestar de las familias las apoyaría sin pedir ni una cuota. Tampoco les exigiría que cumplan acuerdos establecidos y negociados unilateralmente.
A pesar de no contar con un trabajo fijo, Humbertus continúa financiado su vida y la de su familia con dinero que lucra de la necesidad ajena. Ese mismo dinero que le permite miles de horas de ocio para inventar nuevas formas de estafar a sus seguidores.
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Ahora, el veracruzano busca desmentir todo lo que él mismo ha creado, pero su palabra cada vez más pierde el valor entre sus seguidores. La mayoría de ellos se ha alejado de sus prácticas, por eso ha buscado desplazarse a otros estados.
Humbertus se jacta de ser una persona experta en transparencia, pero es la persona más opaca en su actuar.
FUENTE: Redacción
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