Gustavo Madero: “Yo voy a ganar con votos la candidatura del PAN en Chihuahua”

El senador con licencia confía en ganar la candidatura al gobierno estatal, que se definirá en una elección interna el 24 de enero, y también en que el PAN vencerá en junio al partido del presidente.

Gustavo Madero reconoce que Morena fue el gran ganador de las elecciones de julio de 2018 y que su presencia ha ido creciendo en los gobiernos estatales, pero rechaza que los panistas tengan miedo de que el partido del presidente Andrés Manuel López Obrador pueda arrebatarles Chihuahua, una entidad que Acción Nacional recuperó tras derrotar al PRI en los comicios de 2016.

Desde hace 20 años, Madero ha sido una figura dentro del PAN y de la política nacional. Ha sido diputado federal y senador en dos ocasiones , dirigente del partido de 2010 a 2015 y coordinador ejecutivo del gabinete de Javier Corral, a quien este año aspira a suceder en el gobierno de Chihuahua.

Para lograrlo, Madero primero debe ganar la contienda interna por la candidatura panista, en un proceso en el que compite con la alcaldesa con licencia de Chihuahua capital, María Eugenia Campos, quien desde finales de 2020 acusa que el grupo político del gobernador saliente quiere afectar su imagen pública para favorecer las aspiraciones de su rival.

De acuerdo con la alcaldesa, el gobierno de Corral afirma que ella fue beneficiaria de la llamada “nómina secreta” del exgobernador priista César Duarte (2010-2016) y asegura que esto es para beneficiar a Madero y ayudar a que él sea el candidato del PAN en los comicios del 6 de junio próximo.

En respuesta, el aspirante y hoy senador con licencia niega que esto sea verdad, y asegura que su contendiente solo hace estas declaraciones como parte de una estrategia política.

“(La afirmación) es una lectura, una estrategia de campaña de victimizarse, pero que no corresponde con la realidad”, sostiene Madero.

De cara a la elección interna del PAN —programada para el domingo 24 de enero—, Madero asegura que 3,100 de los 8,800 militantes panistas que hay en Chihuahua ya respaldaron sus aspiraciones con firmas, y se declara confiado en que más votarán en su favor para que logre obtener la candidatura.

Yo voy a ganar con votos la candidatura en Chihuahua, no voy a ganar con juicios, con procesos judiciales, yo voy a convencer a la mayoría”.

 Gustavo Madero, aspirante a la candidatura del PAN en Chihuahua

“Vamos con mucha confianza, sin ninguna necesidad de ataque, de descalificaciones de su trabajo, de su persona o de su comportamiento”, agrega en alusión a Campos.

“Debemos limpiar la corrupción de Duarte”

En cuanto a su plan para gobernar Chihuahua —el estado de mayor extensión territorial del país—, Madero adelanta que si en junio ganara la gubernatura intentaría mejorar tres aspectos: la relación del Poder Ejecutivo estatal con los medios de comunicación, la operación política para que otras fuerzas respalden su proyecto, y la participación de la ciudadanía en el diagnóstico de problemas y el diseño de programas.

A la par, otro de sus principales objetivos sería dar continuidad al combate anticorrupción que ha realizado la administración de Corral, así como evitar que las irregularidades atribuidas al exgobernador Duarte queden impunes.

“Debemos continuar lo mejor de Javier Corral, que es la lucha contra la corrupción, el desmantelamiento de la red de impunidad de todos los que se beneficiaron con la corrupción de César Duarte”, dice.

Duarte está detenido en Estados Unidos, donde este 14 de enero tendrá una nueva audiencia judicial en la que se definirá si es extraditado a México o no. Él afirma que existe una persecución política en su contra, mientras Corral, Madero y los panistas de su grupo exigen que se le juzgue en territorio mexicano, por delitos como desvío de recursos públicos, enriquecimiento ilícito y soborno.

A unos días de la elección panista y a cinco meses de los comicios locales, Madero insiste en este punto y concluye con una metáfora sobre la corrupción atribuida a Duarte: “Yo necesito seguir limpiando la maleza para que solamente estén las plantas buenas y no la cizaña o las plagas que invaden y hacen daño al jardín (…) Necesitamos continuar con ese ejercicio de depurar, de liberarnos de esa plaga”.

FUENTE: Expansión política